Esta semana, además de pasar un par de días contando para adultos por el País Vasco, participaré en el espacio de narración oral que se ha habilitado en el FITCA, el Festival Internacional de Teatro Clásico de Alicante: el sábado para público adulto y el domingo para público familiar.

Me encanta poder participar en un evento como este y me sirve de excusa para recordar una conversación que tuve, hace años, con el concejal de cultura (por aquel entonces) de Mérida. En dicha conversación defendí que nada hay más clásico que los cuentos contados y que me resultaba sorprendente que en festivales y otros grandes eventos dedicados a las artes escénicas en siglos pasados no hubiera programación dedicada a la narración oral.

Dicho esto entenderéis por qué me siento doblemente feliz por ir a Alicante en estos días. Gracias a la gente del FITCA y gracias a Raquel López, que sé que ha trabajado mucho para que esto sea posible.

FITCA2020